Después de terminar mi visita a la zona “la mitad del mundo”, tomé un autobús urbano que me llevó de nuevo a Quito, ya en la ciudad indagué como llegar al Teleférico; que seria mi segunda visita del día. Corrí con suerte, pues de donde me encontraba, pasó un autobús urbano que por .25 centavos de dólar me dejó casi en la entrada de este lugar, y digo casi porque tenía que subir algunos metros más para llegar a las taquillas.
Pregunté a las personas que estaban ahí cerca como subir hasta la entrada principal del Teleférico y me respondieron: 1.- Caminando; pero es tardado y cansado; 2.- tomar un taxi; noté que algunas personas optaron por esa opción o 3.- Esperar un tren gratuito que sube a los visitantes desde ese punto que me encontraba, hasta la entrada principal. Opté por esta última opción, sin embargo pasaba el tiempo y el trenecito no llegaba, así que mejor subí en taxi. Llegando a la entrada vi el famoso tren estacionado. Cuando terminé el recorrido por el Teleférico, bajé por el famoso tren.
Taquillas del Teleférico. Dicen que regularmente los fines de semana y días festivos la fila para comprar las entradas es inmensa, por lo que la compra de boletos puede demorar hasta dos horas!. Yo no tuve esa experiencia, pues el día que subí al mirador fue entre semana y no me topé con aglomeraciones, todo fue muy rápido. El precio de la entrada es diferenciado; para extranjeros el costo de entrada es alrededor de 8 dólares y para los nacionales es la mitad. Asimismo, hay precios especiales para estudiantes y personas adultas mayores.
esperando subir a la cabina
Subiendo al Mirador, que se encuentra en Cruz Loma, una de las caras del volcán Pichincha, a cuyos pies se despliega Quito la segunda ciudad más alta de America del Sur.
El teleférico de Quito es uno de los tres más alto de Sudamérica. Parte desde los 2,950 msnm hasta llegar a los 4,050 msnm: hasta la cúspide de Cruz Loma, aledaña al volcán Pichincha.
Me tocó un buen clima, pues pude apreciar la ciudad y sus montañas, dicen que hay días muy nublados donde no se tiene una buena panorámica, yo corrí con suerte pues puede admirar vistas majestuosas!
Yo subí el mes de julio y ahí arriba hacía un frío intenso, por lo que es necesario llevar ropa abrigadora, no llovió pero dicen que llueve, hay que llevar zapatos cómodos o para montaña si piensan escalar, gafas y protector solar.
Muchas actividades se pueden realizar ahí arriba desde subir al volcán Rucu Pichincha, trekking y escalada, incluso ciclismo de montaña. También se puede realizar paseos en caballo, lamentablemente yo no contaba con mucho tiempo así que solo contemple las hermosas vistas desde el mirador.
Después de admirar las hermosas vistas me dispuse a bajar del mirador, me formé en la fila, había ya un poco de gente y cuando llegó mi turno subí de nuevo a la cabina, cuando subes te piden el boleto (ticket de bajada) yo no pregunté qué pasa si lo pierdes, en fin.
Cuando salí de las instalaciones, estaba el famoso trenecito a punto de bajar, así que corrí para alcanzarlo. El tren traslada a los turistas y paseantes de las taquillas a la entrada que se encuentra más abajo, no hubo necesidad de pagar, ya que el servicio del tren es gratis.
De nueva cuenta me encontraba en el punto inicial ahí me dispuse a esperar un autobús para ir al centro de la ciudad, pero tardó en pasar, así que tomé un taxi y le dije al taxista que me dejará en el parque de donde sale el Turibus turístico de Quito, que fue la siguiente actividad que realice en ese día, en el próximo post les contaré al respecto. Saludos.
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