Chia, Cundinamarca, Colombia. Día 3 "Andrés Carne de Res: todo un desafío para llegar a la mesa y comer"

Después de mi visita a Zipaquirá, tomé una camioneta con destino al poblado de Chia, específicamente me dirigí a “Andrés Carne de Res”, un restaurante recomendado por todas las guías de viaje de Colombia y pues como lo pintaban muy atractivo, me dije hay que conocerlo y probar su comida. ¿Como llegar desde Zipaquirá o Bogotá?

Transportarme desde Zipaquirá -lugar donde me encontraba- fue fácil; tomé una buseta a las afueras de este poblado, le dije al chofer que me bajará en el restaurante, pague la tarifa que fue menos de 3 dólares, y en menos 40 minutos ya estaba en el famoso restaurante. Desde Bogotá también se puede transportar en busetas, el tiempo es similar 40 minutos o 1 hora sin tráfico y el costo en transporte público también ronda en los 3 dólares, otra opción es irse en taxi, pero la tarifa aumenta a unos 35 dólares o más.

Cuando me baje del bus, lo primero que veo es una inmensa, pero inmensa fila para entrar, :O me quede atónito, sobre todo porque eran pasada las 4 de la tarde y yo ya tenia mucha hambre, sin embargo, había leído al respecto, que la fila siempre era inmensa para entrar, así que ni modo, si quería conocerlo tenia que armarme de paciencia, ponerme en la fila y esperar que avanzará.

Cuando logré cruzar la puerta de entrada, pensé; por fin! a comer se ha dicho!, pero que equivocado estaba, la fila continuaba adentro y también era enorme!, ahí fue cuando dimensioné la verdadera travesía que me esperaba para poder comer. Y es que ya adentro, los apretujones debido al transito de comensales y meseros era impresionante; el caos era lo que reinaba, me sentía como queriendo entrar a un vagón del metro de la estación Pino Suarez o Pantitlán de la Cd. de México en horas pico.

Ya llevaba dos horas esperando y aún no me asignaban mesa, se dice que este restaurante atiende mas de 3,000 comensales diariamente! La verdad estaba a punto de renunciar y salir de ahí, pero me dije; llevo dos horas esperando no las perderé y seguí esperando, al tránsito de los comensales y meseros se le sumaba el de un grupo de actores que se paseaba por la decena de salones amenizando con cantos, bailes y música, eso me entretenía mientras esperaba ya que este grupo generaba un verdadero ambiente de carnaval y es que así se puede definir este restaurante un carnaval, la rumba como dirían los colombianos es la constante.

Mientras esperaba pude admirar el decorado estrafalario de Andrés Carne de Res, Colombia se respiraba a través de esos objetos.

Por fin! después de mas de 2 horas de espera me asignaron la mesa, llegó el mesero me ofreció la carta y le pedí recomendaciones para comer; me dijo que el plato más tradicional son los asados de distintas carnes y como estaba muy hambriento no quise averiguar mas y pedí eso.

Este es el plato fuerte que comí, asados de distintas carnes, la verdad siendo muy honesto no era cosa del otro mundo, he probado mejores carnes en otros lugares y sin tanto Show para llegar a la mesa, si estuvo sabrosa la comida pero no fue algo extraordinario. El tiempo de espera mientras ordené y me sirvieron fue moderado. La atención por parte de los meseros esa si fue deficiente, tardaban un poco en atender. ¿es caro o barato? Por una pequeña entrada, el plato fuerte (para dos personas) y 4 cervezas pagué la cantidad de $126,758 pesos colombianos arriba de $800 pesos mexicanos, 64 dólares aproximadamente.

Mientras comíamos el show continuaba un grupo de meseras toma la pista de baile y empezaron a bailar distintos ritmos musicales, así estuvieron por buen rato, el ambiente fiestero y de carnaval siempre fue una constante. En el año 2013 este restaurante fue ubicado entre los 50 mejores de America Latina por el The World 50 Best Latinamerica, este reporte lo ubico en el puesto numero 24. ¿Lo recomiendo? Pues aquí les dejo mi reseña como dicen cada quien tiene su propia experiencia, esta fue la mía, sin reservación, no se si reservando con antelación se evite toda esa espera, si es así, se ahorraran un par de horas, en lo general puedo decir que me la pase bien.

Al salir del restaurante, la fila continuaba, pero ya no era tan larga. En el exterior de este restaurante hay una pequeña muestra de arte.

Lo que se mira en el exterior del restaurante Andres Carne de Res.

El paso de Cebra, había muchas vacas intervenidas. Después de caminar un poco por el exterior de este restaurant me dirigí al punto donde me dijeron pasaba la buseta con dirección a Bogotá espere un poco, llegó, me subí y me fui de nuevo para la capital, con rumbo a la estación de autobuses para comprar mi boleto hacia Ipiales ciudad localizada en la frontera sur de Colombia, ya que el día siguiente mi intensión era tomar camino hacia Ecuador, en mi próximo post comentare al respecto. Saludos!.